lunes, 2 de mayo de 2011

ÉDOUARD MANET (IMPRESIONISMO)




Manet es un pintor francés, uno de los inciadores del impresionismo. 
El impresionismo se caracteriza por el intento de plasmar la luz (la impresión visual) y el instante, más allá de las formas. 
Ésta pintura titula Desayuno sobre la hierba y representa un desayuno o almuerzo en un bosque, cerca de Argenteuil. En esta obra, Manet realiza un desnudo en un paisaje. La mujer desnuda es su modelo favorita, Victorine Meurent, y junto a ella están al escultor holandés Ferdinand Leenhoof y su propio hermano, Gustave. Se encuentran entre los árboles y, al fondo, sitúa a otra joven que sale del baño. Manet usó una luz cruda, «fotográfica» que elimina los tonos medios.

PINTURA DE EDUARDO KIGMAN



Eduardo Kigman es un representante del Expresionismo en el Ecuador,  su carrera comenzó como pintor  expresionista por sus ideas político-sociales. Él es el "pintor de la manos", pues pintaba a sus personajes con grandes y poderosas manos, símbolo de fuerza. 
Kigman plasmó en sus trabajos el tema del dolor y el maltrato indígena. La pintura que tenemos aquí titula LA SED y representa a cada jornada agrícola del indígena, bajo el sol intenso, sin agua, trabajando duramente para hacer producir la tierra; son sus manos fuertes las que labran la tierra y construyen el porvenir de su país, a pesar de ser maltratados, discriminados y relegados. 

ALBERTO DURERO



Alberto Durero es uno de los máximos representantes de la pintura renacentista alemana. En 1948 pintó este autorretrato, preocupado por darle énfasis al ser humano. 

Aquí hace una representación  fidedigna de sí mismo,  se nos muestra un Durero con vigor juvenil, elegantemente vestido (con capa y guantes), con una mirada melancólica e interrogante a la vez; gran delicadeza en las formas; minuciosidad tanto en los ropajes (en la camisa interior, en los guantes donde podemos observar las costuras, el sombrero), como en los rasgos personales (el pelo rizado, los ojos, los labios).
De esta forma se expresa la idea de Durero de enaltecerse, pretendiendo ser algo más que un mero artesano, pues era descendiente de uno. 
Al final de la pintura apreciamos un paisaje, secunda al ser humano, que es lo principal para Durero. 
En esta imagen evidenciamos una perspectiva lateral derecha, con angulación en contrapicado leve y en Plano Medio.

LA PINTURA RENACENTISTA


Movimiento cultural y artístico iniciado en Italia en el siglo XV, dirige sus ojos al hombre como centro de las cosas (humanismo), superada la tradición teocéntrica medieval.  Es el «Renacimiento» de la antigüedad clásica.
Se caracteriza por: la renovación hacia lo clásico que se realiza por medio del estudio del natural y de la aplicación de las leyes de la perspectiva, únicamente este arte recibe la influencia greco-romana a través de la arquitectura y la escultura.
Por otro lado, aunque está plena de religiosidad, cada artista busca su propio estilo, en donde el retrato y la representación del paisaje tienen mucha importancia, como en este caso el retrato de la Monalisa.
La pintura Renacentista también se caracteriza por el abandono definitivo de los realces y dorados, en la predilección por los lienzos sin tabla y en la adopción casi exclusiva de la pintura al óleo; y tiene características expresionistas de la pintura religiosa gótica del siglo XV y la influencia del Quattrocento italiano.

EL MALETÍN MEXICANO


Trisha Ziff, es una fotógrafa mexicana se que se encargó del rescate de los negativos de más de 3.000 fotografías de los reporteros de guerra: Robert Capa, Gerda Taro y David Seymour, tomadas durante la Guerra Civil Española.
El trabajo de la mexicana está dedicado a aquellos fotógrafos que también retrataron la Guerra Civil, además de Capa -a quien se le ha dado toda la importancia del caso-. Por esta razón ha publicado en la web la página "El maletín mexicano" en la que relata cómo llegó el maletín de Capa a manos del Centro Internacional de la Fotografía, donde actualmente restauran y clasifican las fotografías.




OTRO CIELO NO ESPERES (FRANÇOIS COCO LASO)

Otro cielo no esperes, exposición fotográfica de François "Coco" Laso, tuvo como objetivo plasmar en imágenes los ritualaes religiosos en Quito, ligados a la Semana Santa. 
Esta es una de sus fotografías, la interpreto como una muestra de fe de los católicos, representa los sacrificios que hacen los creyentes - que por lo general en la "Semana Mayor" tienen que ver con el autocastigo- para agradecerle a Jesús por haber entregado su vida para salvar y redimir al mundo del pecado. 
Además, los pies colgados creo que simbolizan la crucifixión de Jesús, que es uno de los actos que se teatralizan en las procesiones de Semana Santa.